25 de junio del 2011
Si fueran conquistadores hasta arriba, en la parte más alta del mástil, estaría Juan Manuel Sánchez diciendo por dónde. Y abajo sus hijas y su señora esposa.
Harán 11 años de que iniciaron un negocio un tanto por accidente y mucho por la insistencia de Juan Manuel, quien estuvo dando lata a su señora esposa de que elaborara una salsa ante la ausencia de salsas "para llevar" realmente buenas, con sabor realmente casero, como las que hacían nuestras abuelitas.
Angeles Villareal, su esposa, accedió. "Chapada a la antigua", Ángeles es de esas mujeres que realmente son comprometidas con su pareja y con su familia. Son de las que se "mueren en la raya" atendiendo a la familia y jugando excepcionalmente un rol que hace que la familia sea unida.
Ángeles elaboró la salsa de la abuela, de su abuela, de Chipotle, con la receta que tantas veces en su mesa conoció. La respuesta fue contundente. Se le vendieron en cuestión de horas 500 cajas. Ese es el inicio de Food Services Internacional, esta Pyme que ya no es tan Pequeña.
Luego, en alguna ocasión a solicitud de una franquicia, del TACO INN, cuenta con la oportunidad de hacer una salsa en esquema de outsourcing. El reto era muy grande pues la franquicia le delega el reto que no pudo atender ni resolver. Si le delegaron la elaboración de esa salsa era porque francamente no tenían la menor idea de como hacerle.
A Ángeles no le resultó fácil encontrar las razones por las cuales la salsa se "cuajaba", pero como buena terca que es consiguió, luego de ensayo y error y del estudio de los componentes de la salsa, encontrar las razones por las cuales la salsa se hacía sólida. Los de TACO INN se dieron por satisfechos e iniciaron una relación de negocios que hasta la fecha continúa.
Para cuando el primer paso de atender a un negocio inicia, Erika Sánchez, hija de Juan Manuel y de Ángeles, es "desplazada" del trabajo que tenía. Egresada del Tec de Monterrey, consultora de una gran empresa, decide incorporarse a la empresa familiar. La familia había recibido el primer gran reto de abastecer al TACO INN con 100 litros de salsa.
Y en una fiesta, cuando Ángeles participa en ver cómo van las cosas en el naciente negocio, una amiga, al saber del reto de los 100 litros de salsa que hacían en la cocina de su casa usando la licuadora del hogar, le comenta "AYYY ANGELES... QUÉ FLOJERA ME DAS, TAN SÓLO DE IMAGINARTE LAVANDO TOMATES"... Y la amiga recibe una respuesta contundente: "Pues mira... Yo creo que CUANDO TOCA LAVAR TOMATES HAY QUE LAVAR TOMATES."
Partícipe de la idea de que si Dios da dinero es para ayudar a terceros, comienzan a incorporar al esquema de negocio, como parte del conjunto de trabajadores, a niños de la calle, con capacidades distintas y a ex alcohólicos. Su planta laboral llegó a tener hasta un 25 por ciento con estos muchachos.
Hoy día tienen siete sabores picantes para el consumidor final y producen las salsas para negocios importantes como son el Taco Inn, el Alpen House, Chillis, BENEDETTIS, CIE y el Fogoncito, entre otros.
En total abastecen 60 toneladas de salsas y están ya a punto de comenzar a exportar. Para cuando usted lea estos renglones, ellas --Erika y Angeles-- ya estarán en Houston negociando con una gran cadena de retail las características del abastecimiento pensando en el paisanaje que aún queda en Estados Unidos.
Un caso de éxito excepcional.
Si fueran conquistadores hasta arriba, en la parte más alta del mástil, estaría Juan Manuel Sánchez diciendo por dónde. Y abajo sus hijas y su señora esposa.
Harán 11 años de que iniciaron un negocio un tanto por accidente y mucho por la insistencia de Juan Manuel, quien estuvo dando lata a su señora esposa de que elaborara una salsa ante la ausencia de salsas "para llevar" realmente buenas, con sabor realmente casero, como las que hacían nuestras abuelitas.
Angeles Villareal, su esposa, accedió. "Chapada a la antigua", Ángeles es de esas mujeres que realmente son comprometidas con su pareja y con su familia. Son de las que se "mueren en la raya" atendiendo a la familia y jugando excepcionalmente un rol que hace que la familia sea unida.
Ángeles elaboró la salsa de la abuela, de su abuela, de Chipotle, con la receta que tantas veces en su mesa conoció. La respuesta fue contundente. Se le vendieron en cuestión de horas 500 cajas. Ese es el inicio de Food Services Internacional, esta Pyme que ya no es tan Pequeña.
Luego, en alguna ocasión a solicitud de una franquicia, del TACO INN, cuenta con la oportunidad de hacer una salsa en esquema de outsourcing. El reto era muy grande pues la franquicia le delega el reto que no pudo atender ni resolver. Si le delegaron la elaboración de esa salsa era porque francamente no tenían la menor idea de como hacerle.
A Ángeles no le resultó fácil encontrar las razones por las cuales la salsa se "cuajaba", pero como buena terca que es consiguió, luego de ensayo y error y del estudio de los componentes de la salsa, encontrar las razones por las cuales la salsa se hacía sólida. Los de TACO INN se dieron por satisfechos e iniciaron una relación de negocios que hasta la fecha continúa.
Para cuando el primer paso de atender a un negocio inicia, Erika Sánchez, hija de Juan Manuel y de Ángeles, es "desplazada" del trabajo que tenía. Egresada del Tec de Monterrey, consultora de una gran empresa, decide incorporarse a la empresa familiar. La familia había recibido el primer gran reto de abastecer al TACO INN con 100 litros de salsa.
Y en una fiesta, cuando Ángeles participa en ver cómo van las cosas en el naciente negocio, una amiga, al saber del reto de los 100 litros de salsa que hacían en la cocina de su casa usando la licuadora del hogar, le comenta "AYYY ANGELES... QUÉ FLOJERA ME DAS, TAN SÓLO DE IMAGINARTE LAVANDO TOMATES"... Y la amiga recibe una respuesta contundente: "Pues mira... Yo creo que CUANDO TOCA LAVAR TOMATES HAY QUE LAVAR TOMATES."
Partícipe de la idea de que si Dios da dinero es para ayudar a terceros, comienzan a incorporar al esquema de negocio, como parte del conjunto de trabajadores, a niños de la calle, con capacidades distintas y a ex alcohólicos. Su planta laboral llegó a tener hasta un 25 por ciento con estos muchachos.
Hoy día tienen siete sabores picantes para el consumidor final y producen las salsas para negocios importantes como son el Taco Inn, el Alpen House, Chillis, BENEDETTIS, CIE y el Fogoncito, entre otros.
En total abastecen 60 toneladas de salsas y están ya a punto de comenzar a exportar. Para cuando usted lea estos renglones, ellas --Erika y Angeles-- ya estarán en Houston negociando con una gran cadena de retail las características del abastecimiento pensando en el paisanaje que aún queda en Estados Unidos.
Un caso de éxito excepcional.
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