6 de junio del 2011
Producto de una receta centenaria que aprendió a hacer JORGE RUZ, director general, que gracias a las indicaciones de su abuela ya es una de las favoritas entre quienes la conocen y la adquieren con periodicidad.
Resulta que la abuela del empresario siempre se apoyó en Jorge para elaborar la bebida energética a base de coco. Para todas las fiestas la abuela de Jorge era la encargada de llevar la bebida que puede ser consumida por propios y extraños, jóvenes, niños y adultos mayores pues no tiene una sola gota de alcohol.
Con el tiempo la bebida tuvo que ser ya responsabilidad del empresario durante las fiestas familiares y durante los convites a donde se invitó a Jorge a elaborar el preparado natural al 100 por ciento.
En 2004, luego de una visita a la SEMANA NACIONAL PYME, Jorge Ruz decide incubarse en la Incubadora del Politécnico Nacional. Inicia el proceso de incubación a principios del 2005 y la producción inicia entre 50 y 100 litros por semana. Hoy elabora hasta 4 mil botellas quincenales.
La bebida energética no cuenta con taurina ni cafeína.
Tiene una vida de anaquel de 3 meses y ya comienzan a realizarse combinaciones entre las que ya se encuentran las de coco con fresa, las de coco con mango, las de maracuyá y las de capuccino con la base, todas, de esta bebida de coco.
Lamentablemente, en 2006 una gran empresa como es el caso de LA MADRILEÑA registró e indebidamente obtuvo un registro de marca para la marca COCOBEACH y la introdujo en establecimientos de la talla de Wal Mart. El empresario inició la batalla de la defensa de su marca pues su título de marca debidamente otorgado por el IMPI data de 2005, y el de La Madrileña desde 2006.
Producto de una receta centenaria que aprendió a hacer JORGE RUZ, director general, que gracias a las indicaciones de su abuela ya es una de las favoritas entre quienes la conocen y la adquieren con periodicidad.
Resulta que la abuela del empresario siempre se apoyó en Jorge para elaborar la bebida energética a base de coco. Para todas las fiestas la abuela de Jorge era la encargada de llevar la bebida que puede ser consumida por propios y extraños, jóvenes, niños y adultos mayores pues no tiene una sola gota de alcohol.
Con el tiempo la bebida tuvo que ser ya responsabilidad del empresario durante las fiestas familiares y durante los convites a donde se invitó a Jorge a elaborar el preparado natural al 100 por ciento.
En 2004, luego de una visita a la SEMANA NACIONAL PYME, Jorge Ruz decide incubarse en la Incubadora del Politécnico Nacional. Inicia el proceso de incubación a principios del 2005 y la producción inicia entre 50 y 100 litros por semana. Hoy elabora hasta 4 mil botellas quincenales.
La bebida energética no cuenta con taurina ni cafeína.
Tiene una vida de anaquel de 3 meses y ya comienzan a realizarse combinaciones entre las que ya se encuentran las de coco con fresa, las de coco con mango, las de maracuyá y las de capuccino con la base, todas, de esta bebida de coco.
Lamentablemente, en 2006 una gran empresa como es el caso de LA MADRILEÑA registró e indebidamente obtuvo un registro de marca para la marca COCOBEACH y la introdujo en establecimientos de la talla de Wal Mart. El empresario inició la batalla de la defensa de su marca pues su título de marca debidamente otorgado por el IMPI data de 2005, y el de La Madrileña desde 2006.
| Tweet |
0 comentarios:
Publicar un comentario