martes, enero 18, 2011

Día 18: El negocio del software administrativo.

En 1984, Computación en Acción nace con una idea innovadora: calcular una contabilidad en línea. Hoy, con más de 20 años en el mercado, son líderes en el desarrollo de software administrativo. Conoce esta interesante historia en palabras de su propio fundador.


¿Qué es Computación en Acción?
La respuesta más rápida es “Desarrollador de Software”. Yo creo que el software no es un fin en si mismo, sino un medio para lograr algo más. De ahí que la respuesta sea: “Somos desarrolladores de habilidades empresariales”; porque a través del software lo que nosotros buscamos es que el empresario tenga las habilidades para emprender más y mejores negocios.

¿Cómo nace Computación en Acción? 

Pues muy similar a todas las compañías cuando van iniciando. Nosotros iniciamos en 1984, empezamos en una mesa de corona, de esas que tienen el tablero de ajedrez, con dos computadoras y los teclados en las piernas. 

Recuerdo que nosotros en aquel entonces, cuando estábamos creando la compañía pensábamos en hacer una contabilidad en línea, y cuando decíamos que en esa máquina íbamos a hacer una contabilidad en línea, nos decían: “no se puede”, “están locos”; ya ves que siempre hay quien te quiere mucho y te quiere evitar frustraciones ¿no?

Todavía recuerdo con mucho cariño ese momento del Eureka; me acuerdo que era la madrugada, en aquel entonces fumaba, me estaba fumando un cigarro pensando como resolver el problema, y recuerdo ese instante en que te cae el veinte y dices: ¡Ya se como! Nosotros diseñamos un algoritmo que nos permitía discriminar entre un millón de registros en menos de tres accesos, lo cual hacía un algoritmo bastante rápido para hacer la afectación en línea, y la emoción es cuando haces la primera prueba y… ¡funciona! De ahí fundamos la empresa Computación en Acción.

Recuerdo el tema álgido cuando decidíamos si seguir adelante o que hacer. Tuvimos que aprender dos temas importantes: uno era el de patentes y marcas, porque en aquel entonces no había nada. Nosotros registramos nuestra marca en 1984; el tema de aparte de la marca era buscar un canal de distribución. Ahí también se nos presento un panorama con dos opciones: uno era crear nosotros nuestro propio canal de distribución y el otro era darle alguien para que distribuyera nuestro producto a cambio de una regalía. Nosotros afortunadamente nos decidimos por el primer camino, el de crear una red de distribución. Eso implicó mucho esfuerzo, ir y tocar puertas, convencer a los distribuidores de que nuestro producto tenía alta tecnología.

Recuerdo que decíamos: “Bueno, ya que lleguemos a las ventas de 10 unidades mensuales ya estamos del otro lado”, y pues nunca llegábamos a ese punto porque después subía nuestro punto de equilibrio y decíamos “no pues ahora tenemos que vender veinte”.

Afortunadamente fue creciendo el mercado. Hoy somos líderes en México, tenemos 7 sucursales, trabajamos 180 personas directamente en la empresa. Tenemos sucursales en: Mérida, México, Monterrey, Chihuahua, Tijuana, León y Guadalajara que es en donde está la matriz.

¿Cuál ha sido al mayor problema que se ha enfrentado como empresario?

El problema mas grande que yo recuerdo fue en 1994, cuando la crisis de ese año. Aunque nosotros intuíamos que algo podía pasar la verdad nunca creímos que fuera posible que esto sucediera, porque decíamos que si eso pasaba, pues el país entraría en quiebra total y un país pues no puede quebrar.

Desafortunadamente aprendimos que un país “sí puede quebrar” y que si hay crisis de gran magnitud como la que vivimos. Nosotros duramos sin pagar nómina 3 meses. Imagínate lo que es vivir sin pagar nómina por un trimestre. Hubo gente que me dijo: “René, me gusta mucho tu empresa pero tengo que llevar la leche a mi casa y pues ahí nos vemos”. En esto punto, recurrimos al financiamiento a través de impuestos, algo que no recomiendo porque es carísimo, pero es que en ese momento era la disyuntiva: ¿qué pago, impuestos o nómina? Pues nómina sin duda.

Afortunadamente tuvimos rachas muy importantes de ventas. Yo creo que “portero sin suerte no es portero”; el factor suerte no se que tanto lo busques o lo atraigas, pero forma parte del emprendedor, así que tuvimos buenas ventas y cuando la nómina estaba normalizada nos dedicamos a pagar hacienda hasta que en 1998 logramos liquidarla y jamás nos hemos vuelto a endeudar con hacienda.

Einsten tiene una frase que me gusta mucho que dice: “Sin cambiar nuestra manera de pensar, no seremos capaces de resolver los problemas que creamos con esa manera de pensar”. Entonces, si tienes un problema, tienes que determinar cual es la manera de pensar que te está creando este problema. Aquí es cuando se te abre un panorama y entonces surge la innovación, la creatividad y empiezas a pensar diferente. Cada vez que tengas un problema -y este es un consejo personal- piensa: “cual es mi actitud ante el problema que está creando precisamente este problema”.

¿Qué cualidades debe tener un empresario para triunfar?

Yo creo que una mejor empresa nace de tener un mejor empresario, y un mejor empresario se hace con tres cosas exclusivamente: uno es que tenga una visión clara de donde están sus oportunidades de negocio, porque a veces perseguimos cosas que no son oportunidades de negocio y eso nos desvía de nuestro camino original.

El segundo elemento es que tengas información para decidir concientemente, porque a veces tomamos decisiones a ciegas y eso puede muchas veces llevarnos a la muerte de la empresa, porque no tuvimos los elementos necesarios para tomar una verdadera decisión conciente.

El tercero es que le des seguimiento a tus decisiones con orden y disciplina, orden y disciplina. Yo creo que muchas veces esto nos hace falta en las empresas, sobre todo en el empresario, que vamos dando bandazos, cambiando de opinión y decisión y esto le cuesta a la organización en términos de confusión, dirección y metas.

En México tenemos una alta tasa de mortandad: el 95% de las empresas que se crean en un año fracasan en los primeros cinco años de vida. Y nosotros decimos que fracasan por que les da el “SIDA”. Si a las personas físicas les da SIDA a las morales también; y SIDA son las siglas de “Sin Idea De Administración”, y esto es lo que mata a las empresas.

¿Algún consejo para los nuevos empresarios?

Mi mayor consejo es: primero soñar. Si no somos capaces de soñar la clase de empresa que queremos, no podremos llevarla a cabo. Pero con soñar no me refiero a un “dreaming” en el que me hago ilusiones, me refiero a un ejercicio de visualización, hay que verlo, hay oír que nos dicen de nuestra empresa, hay que sentirlo. Si nosotros somos capaces de soñar así de específicamente, somos capaces de realizarlo.

Mira, encuentro mucho en los jóvenes, cuando pregunto, ¿qué quieres de la vida? que me dicen cosas como: “pues quiero ser felíz”… pues esa no es una meta. O cosas como: “pues quiero ser rico”… ¡pues que tan rico! ¡Dilo! “Quiero el próximo año ganar un millón de pesos” eso es muy específico, eso es una meta concreta, porque le podemos poner sonido, color, sentimiento y emoción, y si somos capaces de ponerle eso, no se como funciona, pero el universo se confabula para que esto se te dé.

Fuente: www.ideasparapymes.com

 photo Eres emprendedor1_zpshhoefpnc.jpg

0 comentarios:

Publicar un comentario