22 de mayo del 2011
Cuántas veces al día va usted a orinar? ¿Sabe cuántos litros de agua se desperdician en cada descarga?
Hasta hace poco el desperdicio de este líquido era inevitable, ahora esta situación es reversible, al menos en los baños de los hombres con la propuesta de la empresa Industrias Makech.
Basilio Capetillo Campos, director general de la firma, creó hace cinco años un mingitorio ecológico con calidad de exportación que no utiliza agua y lo mantiene libre de olores.
Los equipos que creó se ven como cualquier mingitorio y drenan hacia la tubería común como lo hacen los equipos convencionales, sin embargo, tienen la capacidad de ahorrar hasta 300,000 litros de agua al año.
Los mingitorios que fabrica están elaborados en cerámica horneada a 1,250 grados de temperatura, lo que permite que el material quede vitrificado y no necesiten agua para eliminar la orina.
Además, su sistema "Odourstop", inventado por Basilio y elaborado de látex natural, impide que se acumule la orina y regresen los desagradables olores.
Relata que desde joven tuvo la preocupación por el agua y bajo esta premisa decidió enfocar sus esfuerzos para mantener el vital líquido.
En un principio se dedicó al comercio de artesanías en su natal Mérida, hasta que llegó a la ciudad de México en busca de más recursos para mantener a su familia.
"Llegué porque mis hijos querían comer tres veces al día", recuerda, luego comenzó a comercializar equipos ahorradores de agua como llaves, fluxómetros, sanitarios y mingitorios.
Un día conoció en una feria al ambientalista Ron Sawyer, quien le pidió que desarrollara un equipo que no utilizara agua.
"Él se dedicaba a recolectar orina para analizarla y utilizarla en el cultivo de vegetales, así que necesitaba que la orina no se mezclara con agua ni con ninguna otra sustancia. Fue así como comencé a hacer mis pruebas. Realmente todo surgió a partir de un condón", comenta.
El desarrollo le tomó cerca de cinco años, tiempo en el que cuenta, llegó a pasar diariamente hasta seis horas frente a un mingitorio para lograr que los líquidos no regresaran. Inclusive, confiesa, mandó a elaborar orina artificial para probar su densidad y lograr que funcionara bien "el elemento", como se refiere al "Odourstop".
Cuando ya tenía un prototipo, Basilio consiguió probar sus unidades en las instalaciones del Seguro Social, "ellos me ayudaron mucho a hacer las pruebas hasta que logré desarrollar el elemento".
Actualmente, el emprendedor cuenta con 42 distribuidores y ha logrado introducir su producto a casi todas las clínicas y hospitales del norte y sur del IMSS y clínicas foráneas.
Además, instituciones como el Tecnológico de Monterrey, la UNAM, la UAM, terminales de autobuses Estrella de Oro, grupo Wal-Mart, Cemento Cruz Azul, Coca-Cola, la CFC, Ferromex y la Semarnat utilizan sus mingitorios.
Capetillo asegura que con sus mingitorios las empresas obtienen además del ahorro en agua y en mantenimiento, pues no necesitan nada especial para su limpieza y no requieren cambio constante de piezas.
El producto usa solamente una trampa hecha de acero inoxidable, que Basilio garantiza por 25 años.
El elemento tiene vida de un año y su reposición tiene un costo de 300 pesos.
Basilio también inventó un mingitorio para mujer; sin embargo, dice es difícil cambiar las costumbres de este sector, por lo que su producto no ha tenido mucha aceptación en este ramo. Ahora exporta sus productos a Colombia y acaba de entrar en negociaciones con empresas en Estados Unidos.
"El Makech es un escarabajo originario de Yucatán adornado con piedras preciosas que sólo se alimenta del agua que logra consumir de una raíz, de la misma forma, en Industrias Makech operamos igual con nuestros mingitorios, consumimos poquita agua y tratamos de contribuir así a no dañar al planeta", concluye.
Cuántas veces al día va usted a orinar? ¿Sabe cuántos litros de agua se desperdician en cada descarga?
Hasta hace poco el desperdicio de este líquido era inevitable, ahora esta situación es reversible, al menos en los baños de los hombres con la propuesta de la empresa Industrias Makech.
Basilio Capetillo Campos, director general de la firma, creó hace cinco años un mingitorio ecológico con calidad de exportación que no utiliza agua y lo mantiene libre de olores.
Los equipos que creó se ven como cualquier mingitorio y drenan hacia la tubería común como lo hacen los equipos convencionales, sin embargo, tienen la capacidad de ahorrar hasta 300,000 litros de agua al año.
Los mingitorios que fabrica están elaborados en cerámica horneada a 1,250 grados de temperatura, lo que permite que el material quede vitrificado y no necesiten agua para eliminar la orina.
Además, su sistema "Odourstop", inventado por Basilio y elaborado de látex natural, impide que se acumule la orina y regresen los desagradables olores.
Relata que desde joven tuvo la preocupación por el agua y bajo esta premisa decidió enfocar sus esfuerzos para mantener el vital líquido.
En un principio se dedicó al comercio de artesanías en su natal Mérida, hasta que llegó a la ciudad de México en busca de más recursos para mantener a su familia.
"Llegué porque mis hijos querían comer tres veces al día", recuerda, luego comenzó a comercializar equipos ahorradores de agua como llaves, fluxómetros, sanitarios y mingitorios.
Un día conoció en una feria al ambientalista Ron Sawyer, quien le pidió que desarrollara un equipo que no utilizara agua.
"Él se dedicaba a recolectar orina para analizarla y utilizarla en el cultivo de vegetales, así que necesitaba que la orina no se mezclara con agua ni con ninguna otra sustancia. Fue así como comencé a hacer mis pruebas. Realmente todo surgió a partir de un condón", comenta.
El desarrollo le tomó cerca de cinco años, tiempo en el que cuenta, llegó a pasar diariamente hasta seis horas frente a un mingitorio para lograr que los líquidos no regresaran. Inclusive, confiesa, mandó a elaborar orina artificial para probar su densidad y lograr que funcionara bien "el elemento", como se refiere al "Odourstop".
Cuando ya tenía un prototipo, Basilio consiguió probar sus unidades en las instalaciones del Seguro Social, "ellos me ayudaron mucho a hacer las pruebas hasta que logré desarrollar el elemento".
Actualmente, el emprendedor cuenta con 42 distribuidores y ha logrado introducir su producto a casi todas las clínicas y hospitales del norte y sur del IMSS y clínicas foráneas.
Además, instituciones como el Tecnológico de Monterrey, la UNAM, la UAM, terminales de autobuses Estrella de Oro, grupo Wal-Mart, Cemento Cruz Azul, Coca-Cola, la CFC, Ferromex y la Semarnat utilizan sus mingitorios.
Capetillo asegura que con sus mingitorios las empresas obtienen además del ahorro en agua y en mantenimiento, pues no necesitan nada especial para su limpieza y no requieren cambio constante de piezas.
El producto usa solamente una trampa hecha de acero inoxidable, que Basilio garantiza por 25 años.
El elemento tiene vida de un año y su reposición tiene un costo de 300 pesos.
Basilio también inventó un mingitorio para mujer; sin embargo, dice es difícil cambiar las costumbres de este sector, por lo que su producto no ha tenido mucha aceptación en este ramo. Ahora exporta sus productos a Colombia y acaba de entrar en negociaciones con empresas en Estados Unidos.
"El Makech es un escarabajo originario de Yucatán adornado con piedras preciosas que sólo se alimenta del agua que logra consumir de una raíz, de la misma forma, en Industrias Makech operamos igual con nuestros mingitorios, consumimos poquita agua y tratamos de contribuir así a no dañar al planeta", concluye.
Tweet |
0 comentarios:
Publicar un comentario